Señor Jesús,
Tú viniste a la tierra
para ofrecer a todos el amor del Padre
y ser apoyo y consuelo
de los pequeños y de los que sufren.
Te damos gracias
por habernos dado a tu siervo fiel,
Don Luis Guanella,
como signo maravilloso del amor de Dios.
Haz que el ejemplo de su vida
pueda resplandecer en todo el mundo
para gloria de Dios Padre
y a beneficio del pueblo cristiano.
Concédenos por su intercesión,
la gracia que ahora te pedimos….
Y haz que podamos imitar sus virtudes;
el ardiente amor hacia la Eucaristía,
la confianza serena en la Providencia,
la tierna caridad para con los pobres,
la pasión pastoral por tu pueblo,
para que, junto con él,
podamos recibir el premio de gloria
que nos preparaste en la casa del Padre.
Amén
Padre nuestro….Ave María…Gloria…
Acuérdate, buena y misericordiosísima
Virgen María, que nos ha sido dada
para ser nuestra providencia.
llenos de confianza en tu patrocinio,
a Ti acudimos invocando tu ayuda en
nuestras necesidades.
A ti confiamos nuestras penas.
Bendice nuestras aspiraciones.
Protege a la Santa Iglesia,
nuestra Patria y nuestras familias.
Ampara a todos aquellos que
acudan a Ti, y a todos aquellos que
ya no saben recurrir a tu ayuda.
abre tu corazón tan bueno,
depositario de nuestras penas.
Y porque tú eres nuestra tierna Madre,
Señora de la Providencia,
acoge benigna nuestras oraciones.
Amén